Silvana Zanlungo y Pilar Bontá presentaron los avances y desafíos de la Dirección de Equidad de Género en la PUCP

Su exposición se desarrolló en el marco de un seminario donde se presentaron los lineamientos en materia de equidad de género aplicados a la formación académica del pregrado en esa universidad trasandina.

La directora y jefa de la Dirección de Equidad de Género, Silvana Zanlungo y Pilar Bontá, respectivamente, viajaron a la ciudad de Lima en respuesta a la invitación de la Pontificia Universidad Católica de Perú para participar en el lanzamiento de un documento que establece lineamientos en materia de equidad de género aplicados a la formación académica de estudios de pregrado de esa universidad vecina.

En la actividad, desarrollada el 27 de abril y organizada por la Oficina para la Igualdad de Género y Diversidad del Vicerrectorado Académico de la Pontificia Universidad Católica del Perú (OIGD- PUCP), Silvana Zanlungo presentó la conferencia titulada Equidad de Género y sus Desafíos para la Universidades del Siglo XXI: la experiencia de la UC Chile, instancia en la que, junto con mostrar el panorama latinoamericano en relación a la equidad de género en la Educación Superior, presentó los principales avances y desafíos de la UC en la promoción de la igualdad de oportunidades para  hombres y mujeres en la planta académica y en el proyecto educativo.

La jornada tuvo como finalidad generar un espacio de intercambio y reflexión en torno a los retos y oportunidades que tienen las universidades católicas para avanzar en la conformación de comunidades educativas que favorezcan el diálogo, el respeto mutuo y el principio de equidad de género, promoviendo de esa manera la disminución de las brechas de género al interior de los espacios formativos. 

En ese contexto, Zanlungo destacó que las universidades católicas en el mundo han avanzado considerablemente en estas materias, tanto en lo concerniente al estudiantado como al segmento académico. En este último se ha puesto énfasis en avanzar en la eliminación de la segregación horizontal y vertical, con miras a evitar lo que se ha denominado la “tubería con fugas”, donde se pierden talentos en la medida en que las mujeres avanzan en su carrera académica y que coincide con la etapa en que emprenden los desafíos de la maternidad.

En cuanto al lanzamiento de estos lineamientos por parte de su par de Perú, Zanlungo afirmó que “se trata de una intervención curricular que están incorporando en el alma de la universidad”, valorando el trabajo que desarrolla esta casa de estudios en la promoción de la igualdad de hombres y mujeres desde el aula. Agregó que “lograr la igualdad de género no es solo una cuestión de justicia social. Como universidades católicas estamos llamados a promover los derechos de todos los miembros de nuestra comunidad, permitiéndoles alcanzar la plenitud dentro de ella”.

Durante su estancia en el país vecino y en el marco de esta actividad, Zanlungo y Bontá también sostuvieron una reunión con el Consejo Consultivo de la Oficina para la Igualdad de Género y Diversidad, espacio en el que presentaron la ponencia Retos y oportunidades en la integración del enfoque de género en una universidad. A ello se sumaron una serie de reuniones con la Vicerrectora de la casa de estudios trasandina, con el equipo de docencia y con el Consejo Consultivo, integrado por decanos y decanas de la de la Pontificia Universidad Católica de Perú.